miércoles, 23 de junio de 2010

Chair tree

Puertas abiertas, sillas arriba

Nuestro árbol ha crecido y preside ya la entrada del colegio y le aporta una nueva identidad. Es el toque final creativo del proyecto “Puertas Abiertas”.
A partir de ahora será la parte más visible para la sociedad de nuestro iceberg de reciclaje creativo-educativo.
Para llegar a él, hemos atravesado una serie de puertas que nos han aportado un variado bagaje y nos han facilitado hacer nuestro trabajo final: el jardín con su “chair tree”, literalmente “árbol de sillas”, que en español bien construido debiera traducirse por “sillero”, lo mismo que “lemon tree” es el “limonero”. Simplemente, lo llamaremos “árbol del arte”, aunque sin duda nuestros alumnos encontrarán una denominación mejor.
En nuestro jardín seguiremos cultivando la imaginación, el arte, los valores y el reciclaje.
Si antes, abrimos puertas, ahora damos una segunda vida a las sillas deterioradas del colegio y las subimos al árbol del arte.
Las obras creadas sin duda han aumentado la autoestima de toda la comunidad educativa que ha visto como con su unión y esfuerzo ha realizado una transformación positiva de su entorno.
Sigamos sembrando árboles.

Alumnos pequeños, grandes artistas


Nuestros pequeños grandes artistas
Cualquiera que haya trabajado con niños de E. Infantil sabe que desbordan imaginación, creatividad y atrevimiento artístico. ¿Por qué perdemos esas cualidades con el paso de los años?
Naturalmente en nuestro blog no podían faltar los artistas más creativos. Por eso nuestros alumnos más pequeños también han querido ser protagonistas y han participado en el proyecto Open Doors con la creación de una puerta.
en la imagen podemos ver a alumnos de la clase de cinco años disfrutando aún más que sus compañeros mayores con la práctica pictórica.

jueves, 3 de junio de 2010

La segunda vida de una farola


La segunda vida de una farola

Cuando la farola le dijo a sus compañeros de desguace que el colegio de La Malahá le daba una nueva vida, que sería el tronco de un árbol-escultura, todos la miraron con envidia, pues tendría un traje de colores, sería lo más importante del árbol y siempre estaría rodeada de la alegría de los niños. Nada que ver con los días sucios, grisáceos y monótonos del desguace esperando un triste destino…..

En un proyecto de reciclaje como es el nuestro, el tronco del árbol tenía que proceder necesariamente de material destinado a vertedero o desguace. Por eso el tronco vivió una primera vida iluminando las calles. Ahora sostendrá ramas de imaginación y dará luz a la creatividad de nuestro colegio.